Día 10: Adiós, adiós, adiós.

La verdad no me puedo quejar. Fueron 11 días y 10 noches de mucha intensidad, de mucho aprendizaje, de muchas amistades nuevas y, sobre todo, de mucho teatro.

No puedo decir tanto de este día, sólo que espero que realmente logremos algo los 64 becarios que acudieron de todos los rincones del país a discutir el teatro que se hacce en México.

Este día, para Tabasco, no hubo ERI, ni Congreso, ni junta de becarios. Nos despedimos de los pocos que pudimos y emprendimos el vuelo con destino a Villahermosa, con los compromisos bien puestos, con las ganas de hacer algo acá en Tabasco.

Me emociona saber que conocí a una Diana distinta, pues sólo nos conocimos nuestros trabajos, pero nunca nos habíamos sentado a platicar, a pensar, a discutir lo que teníamos que hacer por el hecho teatral en Tabasco. Ahora queda todo más claro: tenemos tiempo y al mismo tiempo el tiempo no existe.

Gracias a todos quienes hicieron de este viaje algo tan singificativo, a los aguascalientenses por su calidad humana y a la Coordinación Nacional de Teatro por su apertura, la cual no se dejará de agradecer pero ahora sólo nos resta comprobar que esa apertura no fue sólo palabrería. Confío en que no lo será.

¡Hasta un próximo encuentro, Aguascalientes!